¿Qué hago cuando me insulta?

En los últimos años, en las terapias que realizo con las familias, cada vez aparecen más casos donde las faltas de respeto y los insultos son las protagonistas de las discusiones familiares. Y además, la edad de las hijas e hijos que insultan va reduciéndose cada vez más. Lo que le suele pasar por la cabeza a la mayoría de familias es: si con 5 años me dice estas cosas, cuando tenga 15 ¿qué va a pasar?, por lo que es normal que soliciten asesoramiento psicológico para atajar esta situación.

Yo les cuento una metáfora, como tantas otras veces lo hecho en las terapias, y que la mayoría de ellas están escritas en mi segundo libro.https://familiasenlanube.org/producto/pack-de-libros-de-antonio-ortuno/ La metáfora es la siguiente:

Imagina que eres un guía que te dedicas a llevar grupos a hacer trekking por la cordillera del Himalaya. En un contexto donde eres el protagonista, debes tomar decisiones continuamente, debes liderar el grupo y satisfacer las necesidades y demandas de los participantes en ese viaje. ¿Qué esperan de ti los miembros del grupo?

1. Necesitan sentirte cercano, disponible.
2. Que informes con naturalidad, amabilidad y tranquilidad.
3. Que trasmitas seguridad, coherencia y credibilidad.
4. Que digas claramente qué se puede hacer y que no se puede hacer.
5. Que respetes, escuches y atiendas en la medida de lo posible las necesidades, gustos y preferencias del grupo.
6. Que te adaptes a las características de ese grupo y sus miembros.
7. Que seas predecible y previsible.

Empieza el viaje. El grupo se adentra en un paraje desconocido, lleno de incertidumbres y potenciales peligros (frío, mal de altura, accidentes). Quince días de caminata, rodeado de montañas y nieve, y de nieve y montañas. Más que nunca en sus vidas necesitan de una persona que cumpla las características antes descritas, para poder disfrutar de ese viaje por la montaña.

Ahora bien, como guía no cumples bien tus funciones. No atiendes a las necesidades del grupo, dices una cosa y haces otra, con los otros guías discutes cada vez que hay que tomar una decisión, estás alterado emocionalmente casi todo el tiempo, te diriges a ellos a base de gritos y sermones. En definitiva, generas desconfianza. ¿Qué haríamos hay cualquier ser humano que este viajando contigo como guía? Pues provocarte, contestarte, ponerte en duda. Y si la cosa no cambia, faltarte el respeto, insultarte.

Imagina ahora a ese guía que acude a mi consulta, y me dice: Antonio, tengo un problema. Cuando voy con un grupo de viaje intento hacer mi labor de guía, me insultan, me faltan el respeto. ¿Qué puedo hacer cuando me insultan? ¿Qué le dirías tú?

Como psicólogo, podría entrenarle en habilidades sociales, para que aprenda un estilo asertivo de respuesta ante esas provocaciones. Podríamos trabajar cómo defender su postura, sus derechos, con control emocional y cuidando la relación con el otro, cada vez que se vea insultado. O podríamos trabajar con el objetivo de que realmente ejerciera bien sus funciones de guía. ¿Cuál es tu opinión?

Estamos en una sociedad donde la rapidez manda, donde se quieren soluciones sencillas y rápidas a los problemas que nos surgen. Los psicólogos lo sabemos, y es cierto que vamos adaptando nuestra metodología a este nuevo contexto. Pero también es cierto que cualquier cambio educativo requiere un rodaje, que cualquier proceso de aprendizaje requiere de unos plazos. No hay nada en el mundo que pueda hacer que yo toque mañana fabulosamente el arpa. Por lo que no hay nada el mundo que puedas hacer para que mañana tu hijo o hija deje de insultarte. Se precisa de tiempo.

Así que volviendo a la metáfora, si quieres que tu hijo o hija no te insulte, no te falte el respeto, cumple tu función de guía, porque si te insulta, algo tienes que cambiar. Te recomendamos este curso de Familias en la Nube,https://familiasenlanube.org/cursos/ para que analices tus fortalezas como guía, y lo que puedes enriquecer. Todos podemos aprender a renovarnos como guías.

Es nuestro objetivo en Familias en la Nube, que seas mejor guía en tu viaje familiar.